viernes, 1 de abril de 2011

Érase una trampa

... pero no puedo hablar de nada de eso, entre otras cosas porque no lo hago.

Este post es la continuación del de ayer, por eso el de ayer terminó con unos puntos suspensivos. Supongo que os sorprendería lo que ayer conté, pero realmente era una trampa para ÉL. Os pido disculpas por haber sido víctimas colaterales del engaño.

La cosa es que cuando al poco de empezar a escribirlo, ÉL lo descubrió cotilleando por mi ordenador, le hice prometerme que no lo leería, para darme la libertad de escribir libremente mis historias, pero yo tenía la impresión de que sí que lo leía, así que quería estar seguro.

Y ya lo estoy, por supuesto que lo lee, aunque creo que con las horas que ha pasado, definitivamente se le han quitado las ganas de seguir haciéndolo.

Bueno, tan poco es tan raro lo que conté, ya que en un momento u otro de mi existencia he hecho cosas de esas, pero os aseguro que últimamente mi vida es de lo más monacal.

La verdad es que no me importaría volver a las andadas, pero siempre con ÉL, buscando alguna situación morbosilla que le ponga algo de sal a la vida, pero aunque lo hemos hablado alguna vez, parece que no acaba de dar el paso y lo respeto.

Muchas veces lo he pensado y hay que ver la de opciones de este tipo que tenemos los gays: cruising, saunas, clubes, cuartos oscuros,... Creo que las lesbianas (y mucho menos los heteros) no tienen estas facilidades. Está claro que para follar, los gays lo tenemos mucho mejor montado. Es una pena que todo provenga de cuando tiempo atrás había que desfogarse en la clandestinidad de los cuartos oscuros, por obligación, para no reconocer ni ser reconocidos. Hoy ya no existe esa obligatoriedad del anonimato, pero se mantiene el morbo de la situación.

Me revientan los estereotipos, aunque yo soy también algo dado a utilizarlos, en este caso el de la promiscuidad del colectivo. Seguro que hay de todo. Seguro que muchos de vosotros nunca habéis pisado un antro de estos y seguro que algunos otros sí (aunque todos digáis lo contrario XD).

Y nada más, una vez aclarado el entuerto, me despido por esta semana, porque si sigo escribiendo sobre el tema puedo acabar desvariando demasiado, porque se me vienen a la cabeza demasiados subtemas.

Feliz fin de semana al que lo pueda disfrutar, que yo seguiré encerrado en casa terminando de montar la cocina.

4 comentarios:

  1. Tengo que reconocer que ayer me quedé muy impresionado con tu post... era así como una salida de tono extraña, que podría ser, que tampoco nos conocemos tanto. Claro que ya viste mi consejo, que fueses precavido con lo que cuentas... a tí, tu supuesto anonimato te ha durado menos que a mi incluso. Está bien a veces jugar con este tipo de cosas, aunque yo en mi día prometí no escribir influenciado por lo que D. pudiera pensar... el caso es que algo si te reprimes de contar, más que nada por no herir. Pufff, a mi también me salen subtemas... dejamo entonces el tema "cuartos oscuros" para otro momento.... jajajaja

    bicos Ricos

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  2. Pues yo me lo había creído jajajajaja. El granadino sabe que tengo blog pero dice que pasa de estas cosas, incluso le molesta que hable de él aunque agradece que tampoco dé muchas referencias. De todas formas con él tengo carta libre para hablar de lo quiera, como él dice "el blog es tuyo, haz con él lo que te dé la gana".

    Besos.

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  3. Pimpf, creo que eres el que mejor me conoce (o me intuye, que todavía es muy pronto) por aquí, por eso viste algo raro en el post. A ver si yo soy capaz de no dejarme influenciar, pero lo dudo.

    Christian, siento haberte decepcionado con la realidad, jajaja

    Besos a los dos!!

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  4. jaja, pues vaya susto le meterías al pobre, que penita, jajajaj. Bueno, yo un cuarto oscuro solo lo he pisado de visita turistica, nada más, no me atrae mucho, aunque no se si será por cobardía o algo así, que puede ser.

    Un beso

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